En un par de días se nos acabarán las fuerzas por la Navidad, las canciones de paz y el ambiente familiar comenzará a transformarse en ganas de fiesta, amigos y celebración a lo grande. Se acaba el 2014 y eso hay que gritarlo a los cuatro vientos.
Siempre se habla del look perfecto para estas fechas y el equipo de @Whimed no se quedará atrás, nosotros hoy queremos hablar de los accesorios, de aquellas joyas que brillan y te hacen brillar en ocasiones como esta.
Desde hace miles de años, las joyas acompañan y representan a grandes culturas, siempre han tenido un valor espiritual, decorativo y ostentoso, pero no todo lo que brilla es oro y no todo lo ostentoso es elegante así que hablaremos un poco de todo y para todos.
Desde mi opinión, los básicos en el joyero de una chica deberían ser, unos pendientes discretos, de oro o diamantes de talla brillante, nada que rebase el tamaño de las orejas, un toque de elegancia que pueda acompañarte desde el gym hasta una boda o recepción. Me refiero a unas dormilonas, las pequeñas grandes compañeras de todo evento, pueden ser de oro amarillo, blanco, rosa sólido; redondas o cuadradas. Pueden estar acompañas de diamantes (brillantes) o circonitas, eso lo decides tú. También las hay de cristales austriacos.
No hablamos sólo de marcas, las marcas suele elevar los precios de la joyería, pero quien sabe de joyas, sabe que lo importante es la calidad y la comodidad para quien las usa.
Los diamantes son excelentes compañeros, los precios varían de su color, calidad, corte y por supuesto la marca, aunque si pasas de eso, los joyeros suelen tener colecciones propias de gran calidad que en ocasiones superar a aquellos que doblan el precio, con esto hay que tener mucho ojo, los diamantes por ejemplo muestran su pureza y mejor corte al reflejar la luz creando un halo que deprende los colores del arcoíris.
Pero también las circonitas tienen lo suyo, aunque no son capaces de reflejar la luz, no te dejes llevar por lo que mucha gente piensa, las circonitas son pequeñas piezas creadas con polvo de diamante. Los cristales por otro lado son piezas bastante asequibles y se prestan a figuras más innovadoras y cortes modernos.
Por otro lado las perlas y piedras naturales, tendríamos que aprovechar más lo que el mar y la tierra nos dan, hay excelentes tiendas especializadas en joyería natural, con piedras preciosas como turquesas, cuarzos rosas y rojos, ónix, etc. y que además son perfectos compañeros y están súper IN. Cuando nos regresaron la moda por lo autóctono todos los joyeros giraron la cabeza, porque ¿quién no ha visto por ahí fotos preciosas de pecheras y gargantillas de piedras naturales que hacen de cualquier outfit algo elegante y vanguardista?
Y qué decir de los anillos, oro, plata, platino, rodio, de todo; con piedras preciosas, finas, naturales; pequeños, grande. 2013 dejó la moda oversize con accesorios de tamaños nada discretos pero un básico, básico que no debe faltar en los joyeros es un anillo sutil, de canto liso o redondeado, con piedras o sin ellas, las manos lo dicen todo y no hay mano que no se estilice con el anillo indicado, para gustos los colores, pero no olvides que lo más importante es que tus manos ganen elegancia y no que la pierdan con excesos.
Los brazaletes o pulseras, las clásicas y que pueden heredarse de generación en generación, de eslabones, conocidas como esclavas , también lisas que pueden ser regalos perfectos para personalizarse, con nombre, leyendas, inscripciones, pueden ser modernas, románticas todo en una sola pieza.
No dejemos de mencionar los colgantes, excelentes regalos también, cadenas de eslabones para la moda más roquera, lisas para chicas más discretas con piezas que van desde piedras, perlas, figuras y nombres.
Como siempre hay miles de opciones para miles de gustos y miles de bolsillos, lo más importante de las joyas es saber llevarlas, hacer combinaciones y no excederse, si eliges piezas grandes apuesta por un solo accesorio, a todas nos gusta brillar pero no dejar ciego al de enfrente, sé discreta, conserva un estilo elegante pues la moda no debe estar peleada con ello.
Ahora sí, a disfrutar, ¡que el año se va acabar!
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